Este libro es un ensayo extendido sobre las dinámicas de desarrollo y resistencia desatadas por los avances del extractivismo, una forma de capitalismo que se caracteriza por una crisis multidimensional de alcance global. El extractivismo toma diversas formas, pero el epicentro en su más reciente encarnación es América Latina. La región ha sido el principal blanco de sus impactos socioecológicos negativos, pero también el escenario de las fuerzas más poderosas de resistencia. El autor aborda tres dimensiones críticas de este proceso, incluyendo la nueva geoeconomía y geopolítica del capital, las resistencias en la frontera extractiva y las alternativas propuestas por los gobiernos formados en el “ciclo progresista” en la política, y construidos desde abajo por las comunidades indígenas y no indígenas en la frontera. Finalmente, cierra con una reflexión sobre la posibilidad de una transición postextractivista a un otro mundo de solidaridad social y armonía con la naturaleza, en condiciones de justicia social y ecológica.